Vistas de página en total

domingo, 27 de abril de 2008

Roban la corona de plata de una virgen en la catedral de Ourense


....................................................MIGUEL VILLAR
Los ladrones se llevaron a plena luz del día la diadema repujada de la Dolorosa, una imagen barroca de la escuela castellana de Gregorio Hernández
Jesús Manuel García
Localidad:
ourense
El trasiego de fieles por la capilla catedralicia del Santo Cristo de Ourense era ayer, día grande de su titular, considerable. Quienes circulaban por el trasaltar para tocar la peana del busto de madera de la exquisita Dolorosa que allí se exhibe se dieron cuenta de que algo raro le pasaba a la imagen: le faltaba su diadema. Un nuevo robo en la catedral de San Martiño. Ahora, en un singular espacio de ornamentación barroca como no hay otro igual en Galicia.
La corona o diadema robada data del siglo XIX, es de plata repujada y está inventariada. La Dolorosa tiene otra corona de oro que nunca se la ponen por seguridad.
«La imagen está a una altura suficiente como para que no sea fácilmente accesible si uno no se sube a la mesa del altar. La capilla siempre está cerrada fuera de las horas de culto y las visitas turísticas siempre son acompañadas», explica el canónigo responsable de Patrimonio de la diócesis, Miguel Ángel González García.
Novena
Toda la semana pasada, hasta ayer mismo, se celebró en esta catedral la novena del Santo Cristo de Ourense y, al parecer, entre las siete y las nueve de la mañana alguien que supo pasar desapercibido y seguramente ponerse de acuerdo con otra persona quitó la diadema de plata de su sitio: «Es una pérdida más del patrimonio de la catedral, se ha hecho la denuncia y no sabemos si aparecerá o no. Después de unas indagaciones una señora del puesto de venta de estampas parece que vio a dos personas bien vestidas, una de ellas arrodillada y otra tocando la imagen. Podría tratarse de los responsables del robo», indicó el canónigo. El caso es que nadie levantó sospecha alguna.
De la catedral ourensana se han retirado en los últimos meses varias imágenes de pequeño tamaño para evitar su robo. Porque ya se llevaron un Santiago, un san Blas, un cuadro de san Martín, un Cristo de un sagrario y ahora esta diadema cuya extracción no dañó a la imagen al no estar atornillada sino fijada con un espigón incrustado en un agujero.
La escultura pertenece a la escuela vallisoletana y sigue el estilo de dolorosas de Gregorio Hernández. Se cree que es de alguno de sus discípulos, en concreto de los hermanos Sierra, que trabajaron en Valladolid. Imagen barroca de gran expresividad y elevada técnica, da carácter al espacio posterior del baldaquino de Domingo de Andrade en tan exhuberante capilla. El fervor de muchos ourensanos por esta virgen, tocando su peana con la mano, ayuda incluso a su deterioro por desgaste. El cabildo podría impedir esta práctica dañina.

No hay comentarios: